Los principios ágiles, tal como se describen en el Manifiesto Ágil, ofrecen una base para los proyectos de desarrollo de software ágiles. Estos principios se centran en la satisfacción del cliente, la colaboración, la capacidad de adaptación y la mejora continua en la creación de soluciones de software. No son reglas estrictas e inquebrantables, sino guías que te ayudan a adoptar una mentalidad ágil.
En esta guía, vas a aprender todo sobre los principios ágiles aplicados a proyectos de software, por qué son importantes y cómo podés incorporarlos en tus proyectos y flujos de trabajo de desarrollo.
¿Qué son los principios ágiles?
Los principios ágiles forman parte fundamental del Manifiesto Ágil, un documento publicado por primera vez en 2001 para ayudar a las empresas de software a desarrollar y lanzar productos al mercado más rápidamente.
Los 12 principios ofrecen una base para los proyectos de desarrollo de software ágil y guían a los equipos para entregar valor a los clientes, adaptarse al cambio, fomentar la colaboración, empoderar a las personas, asegurar prácticas sostenibles de desarrollo y promover la mejora continua.
¿Cuáles son los valores ágiles?
Antes de profundizar en los principios ágiles, tenés que conocer los valores ágiles. El Manifiesto Ágil también presenta cuatro valores clave que sustentan las prácticas de desarrollo de software ágil:
- Individuos e interacciones por encima de procesos y herramientas.
- Software funcionando por encima de documentación exhaustiva.
- Colaboración con el cliente por encima de negociación contractual.
- Responder al cambio por encima de seguir un plan.
Como dice el Manifiesto: “Aunque valoramos los elementos de la derecha, valoramos más los de la izquierda”.
¿Por qué son importantes los principios ágiles?
Los principios ágiles ofrecen mucho más que un marco estructurado de trabajo para desarrolladores de software: fomentan una mentalidad que ayuda a los gestores de proyectos de cualquier sector a enfocarse en el aprendizaje continuo, el cambio y la colaboración.
Acá tenés cinco razones por las que los principios ágiles son importantes:
Adaptabilidad y flexibilidad: Los principios ágiles promueven la adaptabilidad al dar la bienvenida a requisitos cambiantes durante todo el proceso de desarrollo, lo que permite a los equipos responder de forma efectiva a las necesidades del cliente y a las condiciones del mercado.
Satisfacción del cliente: El enfoque principal en satisfacer al cliente mediante la entrega temprana y continua de software valioso garantiza que incluso los proyectos complejos estén alineados con sus expectativas y ofrezcan un valor tangible.
Mejora continua: Los principios ágiles fomentan la reflexión y el ajuste constantes, promoviendo una cultura de aprendizaje y mejora dentro de los equipos, lo cual lleva a mejores procesos y resultados con el tiempo.
Eficiencia y colaboración: Al poner énfasis en la colaboración, los equipos autoorganizados y la comunicación cara a cara, los principios ágiles aumentan la productividad y eficiencia del equipo de desarrollo, fomentando la innovación y la resolución de problemas.
Calidad y sostenibilidad: Los procesos ágiles promueven prácticas sostenibles de desarrollo, excelencia técnica y un diseño sólido. Al enfocarse en estos aspectos, los equipos pueden asegurar la entrega de software de alta calidad y fácil mantenimiento a largo plazo gracias a una planificación con objetivos claros.
Las investigaciones muestran que las empresas que adoptan Agile experimentan:
- Mayor colaboración (59%)
- Mejor alineación con las necesidades del negocio (57%)
- Mejor ambiente de trabajo (36%)
- Mejor calidad del software entregado (25%)
- Mejor experiencia de usuario (14%)
- Mejor atención al cliente (13%)
En resumen, los principios ágiles son importantes porque ofrecen una hoja de ruta para el desarrollo de software centrada en el cliente, adaptable, colaborativa y enfocada en la mejora continua, lo que lleva a resultados exitosos en los proyectos.
¿Cuáles son los 12 principios Ágiles?
Antes de motivar a tu equipo para adoptar Agile, necesitas entender los 12 pilares fundamentales que forman su base.
1. Satisfacer al cliente mediante la entrega temprana y continua de software con valor
La filosofía Agile aborda el diseño del producto desde la perspectiva del cliente en lugar de seguir el modelo de “sabemos qué es lo mejor”. Como equipo Agile, tu objetivo principal número uno siempre debe ser un cliente satisfecho. Como dice el dicho: “El cliente siempre tiene la razón, incluso cuando no la tiene”.
2. Dar la bienvenida a los requisitos cambiantes, incluso en etapas tardías del desarrollo
Una parte crucial de Agile es aceptar el cambio y cambiar de dirección en cualquier momento, demostrando así una alta capacidad de respuesta, si eso ayuda a mejorar la ventaja competitiva del cliente.
Si estás en la recta final y de repente llega una solicitud para agregar una nueva funcionalidad, ¿qué haces? Los métodos tradicionales dirían que no se puede, es demasiado tarde para volver a empezar, a diferencia de un marco ágil. Pero el enfoque Agile te anima a decir que sí.
3. Realizar entregas frecuentes de versiones funcionales
La mentalidad Agile se enfoca en dividir los proyectos en partes más pequeñas, o sprints, y cumplir con el principal objetivo de entregar una versión funcional del producto al final de cada sprint. Por ejemplo, Scrum divide los proyectos en múltiples sprints cortos — eventos de duración fija de un mes o menos — que terminan en un entregable concreto y una retrospectiva.
Según la Guía de Scrum:
“Los sprints permiten la previsibilidad al garantizar la inspección y adaptación del progreso hacia un Objetivo del Producto al menos cada mes calendario”.
Esto significa que los productos se entregan mucho antes, cumpliendo mejor con los plazos de entrega, y con mayor frecuencia, adaptándose mejor a los requisitos del cliente, que en enfoques tradicionales. Mira aquí un análisis de los marcos Agile y Scrum y más sobre los valores de Scrum.
4. Unir a personas del negocio y desarrolladores
El Manifiesto Ágil establece que las personas del negocio y los desarrolladores de software deben trabajar juntos a diario durante todo el proyecto, debido a la fuerte dependencia entre ambas partes. Es esencial que las partes interesadas se comuniquen y colaboren para eliminar incertidumbres y asegurar un resultado exitoso.
5. Construir los proyectos alrededor de personas motivadas
Los líderes Agile saben que los individuos motivados hacen su mejor trabajo y obtienen mejores resultados cuando están en el entorno adecuado, con apoyo y confianza. Tus proyectos avanzarán más rápido y de forma más fluida si formas equipos motivados y cuentas con las habilidades adecuadas, les das los recursos necesarios y evitas la microgestión.
6. Favorecer la conversación cara a cara
Los equipos de desarrollo necesitan tener reuniones frecuentes para intercambiar información y reaccionar rápidamente a los cambios. Hay menos posibilidad de malentendidos cuando puedes ver expresiones faciales y lenguaje corporal. Además, puedes comunicar mucho más en menos tiempo que por correo u otros métodos escritos.
7. Medir el progreso con versiones funcionales del producto final
Los proyectos Agile entregan versiones de de software funcional cada vez más completas hasta llegar al entregable final que cumple todos los requisitos del proyecto. Cada versión entregada debe poder funcionar por sí sola, ya que el software funcionando es la medida principal del progreso del proyecto.
Por ejemplo, puedes entregar un auto sin sistema de sonido — pero no puedes entregar solo el frente del auto. Para los desarrolladores, eso significa entregar software funcional en cada iteración — todo lo demás es secundario.
8. Promover el desarrollo sostenible
Un equipo Agile debe mantener un ritmo constante y sostenible durante todo el proyecto. Se trata de establecer un ritmo de desarrollo constante que el equipo pueda mantener indefinidamente, en lugar de trabajar 60 horas una semana y 20 la siguiente.
Grant Currey, de Flight Centre Travel Group, explica cómo quiso volver a lo básico con sus equipos y aplicar una mentalidad Agile de “tarjetas en la pared”. Usando una vista Kanban colorida, todos pueden hacer seguimiento de los proyectos con tarjetas en “cola”, “en progreso” y “hecho”, y actualizarlas cada mañana.
Usando una vista Kanban colorida, todos pueden hacer seguimiento de los proyectos con tarjetas en “cola”, “en progreso” y “hecho”.

9. Prestar atención continua a la excelencia técnica y al buen diseño
Los métodos tradicionales de gestión de proyectos, como Waterfall, siguen un enfoque secuencial con pruebas al final. Entonces, si encuentras cuellos de botella con enfoques tradicionales, puede llevar una eternidad encontrar la causa raíz, y aún más tiempo solucionarlo.
A diferencia de los modelos de procesos tradicionales, Agile enfatiza las pruebas y el monitoreo continuo para que puedas detectar y corregir errores temprano. Es mucho mejor revisar 100 líneas de código cada dos semanas que revisar 10,000 líneas por primera vez al final del proyecto.
10. Mantenerlo simple
Agile optimiza la eficiencia enfocándose en la simplicidad, evitando planificaciones detalladas innecesarias, el arte de maximizar la cantidad de trabajo que no se hace, y se enfoca en tres cosas:
- Minimizar tareas innecesarias que no aportan valor.
- Optar por el diseño más simple y agregar funcionalidades después.
- Buscar formas de hacer más con menos.
11. Usar equipos autorganizados
Los líderes Agile no deberían tener que microgestionar a un equipo.
Una encuesta de Monster reveló que el 73% de los trabajadores considera la microgestión como la “red flag” más grande en el trabajo, y el 46% la identifica como una razón para renunciar.
Si empoderas a los equipos para que se organicen y gestionen de forma independiente arquitecturas, requisitos y diseños, verás que son más felices, productivos y confiables.
12. Reflexionar y revisar de forma regular.
La mayoría de los marcos Agile incluyen una retrospectiva al final de cada fase o sprint, o de las distintas fases del proyecto, realizada en intervalos regulares. Las retrospectivas permiten que los equipos revisen lo que funcionó, lo que no, y hablen sobre cómo mejorar de cara al futuro.
Este enfoque en la mejora continua ayuda a que tu equipo se mantenga adaptable y siempre busque formas de mejorar sus procesos y su trabajo. Es la mentalidad que te permite lograr otros principios, como encontrar maneras más simples de hacer las cosas y abrazar el cambio.
Cómo implementar los principios ágiles con monday.com
Ya que identificaste los principios a seguir, la siguiente pregunta es “cómo” integrarlos en tu flujo de trabajo y procesos.
Ahí es donde entra monday dev.
Desarrollado dentro del sistema operativo de trabajo monday.com, monday dev equipa a los equipos de producto y desarrollo con herramientas para gestionar todos sus procesos sin complicaciones y alcanzar sus objetivos establecidos más rápido en una plataforma fácil de usar. Ahorra tiempo con plantillas y un paquete completo de vistas, widgets y tableros diseñados para agilizar todo tu flujo de trabajo de desarrollo —incluyendo roadmaps, sprints, backlog, seguimiento de bugs y elementos de retrospectiva— todo en un solo lugar.
Gestión de sprints
En monday.com, usamos sprints de 2 semanas para ayudar a nuestros equipos a trabajar en ráfagas cortas y productivas, pero puedes configurar los sprints para que duren entre 1 y 4 semanas —lo que mejor se adapte a tu proyecto y equipo.

Usa nuestra plantilla de planificación de sprints para planear, seguir y gestionar tus sprints de principio a fin, y cumplir con los principios ágiles #3, #7, #9 y #12.
Gestión de carga de trabajo
Cuando una tarea de repente lleva dos días en lugar de uno o una actividad de baja prioridad se convierte en urgente, necesitas adaptarte sin saturar a tu equipo. Con monday dev, puedes visualizar y gestionar la carga de trabajo de tu equipo y mantenerte siempre al tanto de los proyectos y plazos.
Reorganiza y reasigna tareas con solo unos clics —cumpliendo con los principios ágiles #2, #8 y #10.
Comunicación y colaboración
Nos gusta mostrar un tablero en las reuniones del equipo —ya sea en el daily Scrum o en la retrospectiva. Una vista de tablero de sprint puede ayudar a mantener al equipo enfocado, asegurar que todos estén alineados y destacar las métricas clave que necesitan discutirse.

Al reunir a todo el equipo (virtualmente o en persona) y enfocarte en lo que se necesita para satisfacer al cliente, puedes aplicar los principios ágiles #1, #4, #5, #6 y #11. Prueba nuestra plantilla de plan de proyecto de alto nivel para revisar rápidamente qué está en camino, qué necesita atención y qué se viene más adelante.
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Usa automatizaciones para simplificar tus flujos de trabajo y cumplir con los principios ágiles #5 y #10.
Integraciones sin fricciones
Con monday dev, puedes integrarte fácilmente con las herramientas que ya usas, incluyendo GitHub, Jira, GitLab, Bitbucket y Slack, para desarrollar productos más rápido y cumplir con los principios ágiles #1, #3, #7, #8 y #9.

Incorpora los principios ágiles en tus proyectos de desarrollo
Los principios ágiles guían a los líderes de proyecto y equipos a entregar valor a los clientes, adaptarse al cambio, fomentar la colaboración, empoderar a las personas, asegurar prácticas de desarrollo sostenibles y promover la mejora continua en sus proyectos.
Explora nuestras plantillas personalizables de desarrollo de software para organizar mejor tus proyectos y aplicar los principios ágiles para lograr mejores resultados.
Preguntas frecuentes
¿Qué significa “Agile”?
"Agile" no es un acrónimo ni representa algo específico; es una filosofía y un enfoque de gestión de proyectos que enfatiza la flexibilidad, la colaboración y el desarrollo centrado en el cliente. Se trata de adaptarse al cambio y entregar valor de manera eficiente.
¿Cuáles son los 4 principios de Agile?
Los cuatro principios fundamentales de Agile, según el Manifiesto Ágil, son:
Individuos e interacciones por encima de procesos y herramientas.
Software funcionando por encima de documentación exhaustiva.
Colaboración con el cliente por encima de negociación de contratos.
Responder al cambio por encima de seguir un plan.